No ha empezado con buen pie su reinado Carlos III.
Suceder a la reina madre es una faena mayúscula, más aún si después de 73 años de existencia sigues estando muy verde para el cargo.
Primero fue el lío con el tintero. Que si apártalo que me molesta, que si vuélvelo a apartar... Ahora de nuevo una pluma que le mancha la mano y se cabrea. Qué manera de desaprovechar una oportunidad así para mostrarse cercano y "humano".
¿Quién no se ha manchado con tinta alguna vez? ¿Qué tal hacer una broma con la situación y parecer un tío simpático? En fin... así se las ponían a Felipe II y no las desaprovechaba.
Y por último (por ahora, claro, porque vendrán muchas más), su primer discurso oficial como rey. Un discurso grabado de 8min 55 seg.
Nada más verlo casi se me atraganta la comida.
Primer segundo y...
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Sigo viendo hasta el final y...
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Idem...
¿Qué hizo esta vez el nuevo rey?
Su lenguaje corporal, sus brazos. Esa mesa...
Se tiró todo el discurso parapetado sobre una mesa y con los brazos escondidos detrás de ella, como un niño castigado.
Es difícil ver cometer un error tan obvio en alguien que se dedica a hablar de forma profesional. A veces sucede, pero no es muy común.
Podríamos pensar que es responsabilidad de su equipo -que lo es- pero, después de más de 50 años siendo un personaje público de su relevancia, estas cosas se aprenden solas. Son muy básicas.
Si no las aprendes es que eres muy torpe.
Mucho.
Bueno, da igual, que Carlos no es mi rey, así que allá él.
Dicho esto, en mi Curso de Oratoria explico cómo colocar los brazos, las manos y cómo moverlas. No solamente para evitar parecer un robot ochentero, sino para acompañar a tu mensaje y que se entienda mejor.
Y para reforzarlo.
Hablar hablamos todos los días, no tienes que dar un discurso o una charla para entender la importancia de colocar bien tus brazos y usarlos a tu favor. Tu lenguaje corporal también comunica cuando hablas con tus amigos, compañeros de trabajo, tu jefe o tu pareja.
Y mucho.
Dicho esto, si quieres aprender a comunicar mejor con los que te rodean, quizá esto te sirva:
Curso de Oratoria
Pasa un gran día.
Esaú.
PD: Carlos, es en español, espera a que saque la edición inglesa.
El alta es gratis, la baja también.
* Escribo a diario historias sobre cómo destacar al comunicar en público. Además, te ofreceré productos de pago de alto valor para mejorar tu oratoria y que disfrutes hablando. Si esto es un problema para ti o crees que puedes ser el próximo Obama en dos tardes, por favor no te suscribas.
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